El virus de la prisa.

Conforme avanzaba en la preparación de este material, aún cuando había analizado los 5 hábitos que restan energía y movilidad. Me di cuenta que todos estaban derivados y relacionados con la prisa.

  • De la prisa surgen:
  • Ansiedad
  • Sobre esfuerzo
  • Tensiones musculares
  • Falta de descanso (son los más detectables).

En este proceso me encontré, o me encontró, el libro de Carl Honoré «La lentitud como Método» ,y fue entonces cuando me di cuenta que de la prisa surgen otros tantos hábitos y actitudes que están dañanado nuestra salud y no lo percibimos.

Yo misma soy presa de la prisa, ahora puedo identificarlo y contrarrestar.

Desespero, impaciencia, rabia, incluso dolor y otros factores surgen con la prisa.

Algunas personas tienen prisa siempre y no son concientes de ello. Yo era así. Un día me di cuenta que hasta cuando no tenía prisa, tenía prisa.

–              Cuando empecé a observar los momentos en que la prisa me dominaba, me di cuenta cuánta energía me robaba.

–              Así que poco a poco, aún me observo a veces con prisa, pero he ido reduciendo el estado de la prisa al darme cuenta que:

–              Me provoca estado de ansiedad

–              Respiración corta

–  Tensión en algunas zonas corporales como mandíbula y cuello.

¡Y lo más sorprendente! las personas con prisa tenemos dificultad en poner atención plena durante muchos minutos.